Todas aquellas marcas que aun siguen a flote después de la caída económica que se produjo por el esparcimiento del Covid-19 en el mundo, se han visto obligadas a cambiar muchas de sus estrategias y formas de interacción con su publico objetivo para lograr seguir en pie. El packaging no se vio exento de estos cambios, pues con la necesidad del público de recibir cada uno de sus productos de la forma más segura posible para evitar el contagio, la selección de materiales para dicho fin ha dado un vuelco.
En este mismo sentido, el embalaje ha tenido que reforzar su seguridad notablemente, pues se trata de un sector donde por lo general hay contacto entre las manos de las personas y el producto, por lo que las marcas se han puesto a la tarea de fabricar envases de plástico y bolsas que tengan todas las garantías necesarias para evitar el contagio.
Por otro lado, el público en general ha cambiado su forma de consumo, se han vuelto mucho más exigentes con el packaging, pues no es un secreto que el Covid-19 puede sobrevivir durante varias horas o incluso días en diferente superficies y materiales. Esto ha llevado a un aumento significativo en la demanda de productos empacados en sustratos plásticos de un solo uso, lo que hace sentir a los consumidores mucha más tranquilidad por la higiene que esto significa.
Cambios en las tendencias del packaging.
El embalaje de productos que se tiene actualmente es mucho mas sostenible que el de hace unos años, las marcas han tenido que adecuarse en pocos meses a este cambio, pero además de ello el confinamiento social ha sido un acelerador del mismo, pues las personas han tomado mucha más conciencia de la situación de la sociedad en general.
Una de las tendencias que mas se pueden ver es que los envases se han adaptado mejor a las necesidades de los consumidores, ya sea para productos pequeños o grandes, también se puede notar que el embalaje transparente es el más escogido, ya que implica una muestra de claridad por parte de la marca, dándole protagonismo al producto.
Así mismo, una de las tendencias más notorias en lo que se refiere a packaging es el aumento de envases para llevar en la rama de la alimentación que se afianzo con la migración de muchos restaurantes al cambio de la comida para llevar. Según los análisis esta tendencia puede resultar mucho más duradera y es que se está creando una cultura de consumo a domicilio a nivel mundial.